Titular de hoy:
En vez de preparar la maniobra el piloto tunecino se puso a rezar. Ha sido condenado a diez años de cárcel, al igual que el copiloto. Optó por un amerizaje en lugar de intentar llegar a un aeropuerto."
Sin palabras, no me salen...
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¡El enlace a la noticia, por favor! ¡Quiero leerla entera!
ResponderEliminar¡Hecho!, Sorry, las prisas de hacerlo en el curro.
ResponderEliminarVaya burro!
ResponderEliminarpero la noticia es un poco confusa (por no decir que huele a un pelín manipulada), por un lado dice que "se detuvo para rezar", casi como que lo hizo de forma meditada, consciente y serena; pero luego dice que "el piloto sucumbió al pánico".
Vamos, que no me parece admisible lo que ha hecho y si ha elegido esa profesión debería saber controlar sus emociones. Pero creo que media un abismo entre ponerse a rezar víctima de un ataque de pánico (algo que puede ser comprensible aunque punible) y tomar la decisión friamente de que lo mejor es rezar en lugar de seguir el procedimiento, algo que es propio de un grandísimo hijo de la gran P
Sí, está claro que está manipulada, pero sigue siendo muy jevi. Yo lo pillo mirando a la meca en plena emergencia y le saco los ojos a chupetones. Y aterrizaría el avión sólo para poder matarlo tranquilamente después.
ResponderEliminarLa verdad, Oracu, es que se detuviera a rezar pensando que por fin alcanzaba el paraíso musulmán, o el que fuera, o llevado por el pánico es igualmente para cagarse en sus muertos. Me imagino en manos de un cirujano que al ver la sangre se desmayara y me dejara morir en la mesa de operaciones; seguramente no se le podría culpar por desmayarse, pero desde el otro mundo o donde me encontrara me iba a cagar igual en to lo suyo.
ResponderEliminarJoder, Japuta, "a chupetones", ¡hasta me ha dolido! jajaja
Si es que la estupidez humana no tiene límites...hay que ser subnormal!!!
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