Me ha llegado un correo de esos de reenviar a todos tus contactos y demás gilipolleces para perder el tiempo miserablemente, y aunque no suelo hacer esto, éste me ha llamado especialmente la atención porque hace tiempo que quería hablar de este tema. Por eso lo reproduzco:
Hace unos días, en una ciudad de Francia, un cartel en el escaparate de un gimnasio, en el que aparecía una joven espectacular, decía:
'ESTE VERANO ¿QUIERES SER SIRENA O BALLENA?'
Dicen que una mujer madura, cuyas características físicas no han trascendido, respondió a la pregunta publicitaria en estos términos:
“Estimados Sres.:
Las ballenas están siempre rodeadas de amigos (delfines, leones marinos, humanos curiosos…). Tienen una vida sexual muy activa, se embarazan y tienen ballenitas de lo más tiernas a las que amamantan. Se lo pasan bomba con los delfines poniéndose moradas de camarones. Juegan y nadan surcando los mares, conociendo lugares tan maravillosos como La Patagonia, el mar de Barens o los arrecifes de Coral de la Polinesia. Las ballenas cantan muy bien y hasta graban CD's. Son impresionantes y casi no tienen más depredador que el ser humano. Son queridas, defendidas y admiradas por casi todo el mundo.
Las sirenas, por el contrario, no existen; y, si existieran, harían colas en las consultas de los psicoanalistas argentinos porque tendrían un grave problema de personalidad '¿mujer o pescado?' No tienen vida sexual porque según cuentan matan a los hombres que se acercan a ellas y, además, ¿por dónde?. Así que tampoco pueden tener hijos. Son bonitas, es verdad, pero solitarias y tristes. Además ¿quien querría acercarse a una chica que huele a pescado?.
Yo lo tengo claro, quiero ser ballena.
“Estimados Sres.:
Las ballenas están siempre rodeadas de amigos (delfines, leones marinos, humanos curiosos…). Tienen una vida sexual muy activa, se embarazan y tienen ballenitas de lo más tiernas a las que amamantan. Se lo pasan bomba con los delfines poniéndose moradas de camarones. Juegan y nadan surcando los mares, conociendo lugares tan maravillosos como La Patagonia, el mar de Barens o los arrecifes de Coral de la Polinesia. Las ballenas cantan muy bien y hasta graban CD's. Son impresionantes y casi no tienen más depredador que el ser humano. Son queridas, defendidas y admiradas por casi todo el mundo.
Las sirenas, por el contrario, no existen; y, si existieran, harían colas en las consultas de los psicoanalistas argentinos porque tendrían un grave problema de personalidad '¿mujer o pescado?' No tienen vida sexual porque según cuentan matan a los hombres que se acercan a ellas y, además, ¿por dónde?. Así que tampoco pueden tener hijos. Son bonitas, es verdad, pero solitarias y tristes. Además ¿quien querría acercarse a una chica que huele a pescado?.
Yo lo tengo claro, quiero ser ballena.
PD : En esta época en que los medios de comunicación nos meten en la cabeza la idea de que sólo las flacas son bellas, prefiero disfrutar de un helado con mis hijos, de una buena cena con un hombre que me haga vibrar, de un café con pastas con mis amigos.
Con el tiempo ganamos peso porque al acumular tanta información en la cabeza, cuando ya no hay más sitio, se reparte por el resto del cuerpo, así que no estamos gordas, somos tremendamente cultas. Desde hoy cuando me vea el culo en el espejo pensaré, madre mía, lo lista que soy....... "
Por partes, que diría el destripador. En primer lugar está claro que es un correo de esos que no sé cómo se llaman pero cuyo fin es moralizante y aleccionador, y que ha sido creado con el fin exclusivo de ser reenviado una y otra vez, hasta crear una leyenda urbana. Entre otras cosas, porque dudo mucho que alguien hubiera tenido el mal gusto de poner un título semejante a un cartel publicitario (aunque todo puede ser...) en su propio negocio.
En segundo lugar, estoy bastante de acuerdo con la primera parte de la carta en la que se defienden las cualidades de las ballenas, animales encantadores y menos respetados de lo que sin duda deberían serlo. Pero no creo que para defender una postura deba atacarse la contraria, por lo que no puedo estar de acuerdo con un ataque hacia unos personajes mitológicos fabulosos como son las sirenas.
Y en tercer lugar, no estoy del todo conforme con el planteamiento soterrado y profundo del mensaje. Porque, señoras y señores, seamos sinceros, ¿qué prefirirían para sí mismos o sus seres queridos, la imagen estilizada y elegante de la primera foto o la de la segunda que me abstendré de calificar?
Hombre, por favor, no nos vayamos por los cerros de Úbeda, que con la puta manía de lo políticamente correcto al final siempre acabamos exagerando los términos. Odio la demagogia barata, aunque sea con fines ejemplarizantes y educativos. Es decir, de acuerdo con la primera parte de la posdata, pero hasta ahí; ¿qué gilipollez es esa de que la cultura o la listeza nos engorda?, ¿las flacas entonces somos incultas y poco listas, no hemos acumulado información suficiente, y nos pondremos como focas cuando lo logremos?, y ¿las flacas acaso no disfrutamos de un helado, una cena o un café con pastas? Mira que yo suelo generalizar, pero en este caso la generalización es excesiva, y creo que dañina y hasta perjudicial.
Ni todas las gordas son cultas, listas y felices, ni todas las flacas somos incultas, tontas y obsesivas con el peso. Por otra parte, alentar a alguien a "ser ballena", con la cantidad de problemas de salud derivados de la obesidad que existen me parece tan mala idea como promocionar la delgadez extrema.
Terrible que los cánones de belleza y moda esclavicen a la mujer, o en algunos excepcionales casos también al hombre, pero terrible también que se anime a nadie, hombres o mujeres, a dejar de cuidarse, no ya por tener un físico agradable a la vista, que también, sino simple y llanamente por salud.
Fenomenal escrito.
ResponderEliminarIncialmente al leer el correo, me incliné por la postura que defines como políticamente correcta (debe de ser programación inconsciente, supongo)y me pareció que estaba muy bien hecho.
Sin embargo, al leer tu reflexión posterior, he de reconocer que tienes toda la razón, sí señora.
Un escrito muy acertado. Enhorabuena
Es que Electra siempre cavila más allá de lo que en principio cualquier persona piensa o razona.
ResponderEliminarPor eso mi usta tanto.
El problema es que vivimos en una sociedad enferma en la que se transmite la idea de que sólo vas a ser aceptada si estás estupenda de buena, especialmente las mujeres, porque los hombres... en fin, no necesitan vender una imagen de la misma manera que una mujer para conseguir un puesto de trabajo, para un hombre buena presencia significa aseado y bien vestido, para una mujer, además, significa estar más o menos en tu peso, mejor menos que más, ir maquillada como una profesional, vestir con gusto exquisito y además sonreír.
ResponderEliminarHasta que no seamos capaces de aceptar las diferencias y cuidarnos por salud más que por estética seguiremos viviendo en una sociedad enferma.
Por lo demás, completamente de acuerdo con la inimitable Electra.
En cualquier caso la sirena de la foto tiene algo... aunque le falte algo fundamental. (Afortunadamente la foto no tiene aroma)
ResponderEliminarTodo muy guachi, bien expuesto, bien empaquetado, bien desarrollado...
ResponderEliminarHe puesto otro posvaya. No tiene remedio. Es como yo cuando clamo contra el despilfarro de recursos y energía. Me dicen a todo que sí, y luego, r que r.
Pero aún así, tampoco me cayo, como tú, que poquitos a poquitos vamos calando.
No hay mujeres guapas o feas, sólo agradables o ariscas. Y te lo digo con conocimiento de causa.
Sí, Aspective, es lo que tiene lo políticamente correcto, que nos arrastra a base de tocarnos la fibra sensible y, si no nos esforzamos un poco, nos lleva a pensar según la corriente. Por no mencionar que al expresarte en contra de lo que se considera políticamente correcto, o lo que es lo mismo, decir verdades como puños, lo normal es que siempre haya alguien, de natural dispuesto al victimismo, que se pueda sentir ofendido.
ResponderEliminarA mí también me ha pasado, hasta que me he dado cuenta que me estaba congratulando porque me incitaran a ser gorda, y comparando el estarlo con la cultura y la listeza. Y ahí es cuando me he mosqueado.
Ay, la Japu, que me gusta que me diga cosas tiennnas...
ResponderEliminarSí, Min, recuerdo una época en que leía en un anuncio de solicitud de trabajo "buena presencia" y me echaba a temblar porque sabía que me iba a encontrar con las típicas Barbies (no Japutas sino Barbicursis) emperifolladas y con pinta de modelis. Ah, y la cantidad de veces que me he levantado en mitad de una entrevista de trabajo porque una de las exigencias para el puesto era ir a trabajar perfectamente pintada y (atención) mona. No te jode, como si la pintura pudiera hacer milagros...
ResponderEliminarTienes toda la razón, es fundamental que aprendamos a aceptarnos como somos, intentando mejorar si consideramos que así debe ser, o pasando de hacerlo si no lo consideramos así aunque la sociedad diga lo que diga. Únicamente debería importarnos gustarnos a nosotros mismos y estar contentos con nuestros cuerpos, así como atender solamente a nuestra opinión personal, propia e intransferible y, como mucho, a la de nuestro médico.
T'a buena, ¿eh, Aspective? (un secretillo: si te fijas en su cintura, en el lado derecho, observarás que le han metido mano con el potochoped, pero vamos, que el potochoped tampoco hace milagros, y buena está, p'a qué vamos a engañarnos)
ResponderEliminarPues, con conocimiento de causa, PeleÓn, te diré que yo sí que conozco mujeres feas y además ariscas, tojuro. Y guapas y agradables, yo misma, sin ir más lejos.
ResponderEliminar